Empezamos el año y ya a estas alturas hemos definido nuestros objetivos y metas para el 2022… pero a veces… a pesar de la claridad de estas metas, empezamos a trabajar en ellas y no parece que estemos siendo efectivas. ¿Te sientes asi en algún momento?…
La explicación es sencilla: nos desenfocamos…. nuestra mente empieza a generar ruidos mentales que nos despistas de nuestro camino. Decía Buda… “Tu peor enemigo siempre será tu mente, porque ella conoce todas tus debilidades.” y es cierto…tu mente puede ser tu mejor aliada en el logro de tus metas pero también puede ser tu peor enemiga…. ¿La buena noticia?…Está en tu mano trabajar para que la mayor parte del tiempo sea tu aliada.
La Pregunta Clave
Asi como cuando queremos ponernos en buena forma sabemos que necesitamos entrenar de una u otra forma nuestros músculos… la pregunta es…¿Cuánto tiempo de tu día inviertes en entrenar tu mente y ganar control de tus pensamientos con el objetivo de conseguir tus resultados?…
¿Y para qué necesitamos entrenar la mente?... Seguro que ya lo sabes pero la tarea primordial de tu cerebro es garantizar tu supervivencia y además, hacerlo con el menor consumo de energia posible, y es por ello que adopta varios mecanismos que le funcionan para eso:
- Crea hábitos y rutinas de comportamientos automáticos.
- Busca el placer o la gratificación inmediata.
- Predice el futuro. ( si ya imagina lo que va a pasar, gastará menos energia).
Y además, sin ánimo de profundizar en todos los detalles, un dato más interesante para ti…el cerebro consume la mayor parte de su energia no tanto en relación con lo que sucede fuera sino con todo lo que tiene que ver con el pensamiento interno. y la regulación fisiológica de tu organismo.
Si de forma automática el cerebro está enfocado en ahorrar energia, cuando le pedimos que nos favorezca para mejorar la concentración y la atención, normalmente no suele gustarle y desde ahí crea las justificaciones necesarias para desenfocarnos… ¿Tiene sentido ahora la idea de entrenar tu mente?…
Nuestros pensamientos
Diariamente pasan por tu mente miles de pensamientos, la mayor parte de los cuales son negativos…y por tanto, si funcionamos en modo automático, serán ellos los que ganen la partida. Decía un buen mentor amigo que todos los días a cada paso y a cada decisión libramos una batalla en donde solo hay 2 opciones posibles: o gana tu mente o ganas tu ¿qué rol quieres tener?…
Si apostamos por trabajar (con diferentes técnicas) el cortex prefrontal (que es la parte de tu cerebro que trabaja intensamente cuando te enfocas en tus objetivos y el beneficio que tendrás si los consigues) es posible que logremos ser el vencedor/a de cada una de esas batallas. Al llegar la noche deberías hacer un repaso y no encontrar excusas, ni justificaciones y hacer un balance positivo por la experiencia del día… esta práctica repetida en el tiempo te ayudará a estar más cerca de tus objetivos. Si no haces este ejercicio de enfoque consciente es muy probable que tu mente te gane por goleada con miles de pensamientos negativos y de excusas y creencias basadas en patrones aprendidos.
Cuando dejamos que nuestros pensamientos gobiernen nuestra mente por inercia estamos reforzando la falta de claridad de pensamiento, la falta de atención, la dispersión, el bullicio emocional , la falta de equilibrio, etc… Y son estas situaciones las que están poniendo «palos en la rueda» de tu viaje al éxito y logro de tus metas.
Algunos trucos para entrenar la concentración
Hay muchos ejercicios y practicas que puedes usar para entrenar la concentración, y con ello, el enfoque de tus pensamientos… aquí te compartimos un par de practicas simples:
- Respiración consciente – una de las técnicas que siempre funcionan y de forma mu eficiente es pararnos y poner foco consciente en nuestra respiración… con los ojos cerrados o con la vista puesta en un punto fijo, pon toda tu atención en tu respiración… puedes focalizarte en como entre y sale el aire, o como se mueve tu abdomen o si te dispersas, contando el numero de inspiraciones y expiraciones… Cinco minutos, dos o tres veces al día, empezarás a notar la diferencia,…si lo mantienes como una disciplina diaria.
- Saca la basura de tu mente – te recomiendo que si puedes, veas en Youtube un extracto de la película «El Guerrero Pacífico»… toda la película es una lección magistral de como entrenar tu cerebro para que funcione a tu favor… pero cuando menos… busca el trozo en el que el «mentor» protagonista de la película literalmente hablar de «sacar la basura de tu mente»… Es de lo mas aleccionador. Busca formas en las que tu puedas sacar esa basura diariamente… anotando los pensamientos negativos en un papel que luego rompas, por ejemplo.
Refuerzo y motivación
“Somos lo que hacemos repetidamente. La excelencia, entonces, no es un acto, sino un hábito” Aristoteles
Entrenar la mente para que logres tus objetivos de negocio debe convertirse en un hábito…y sabemos que lograr cosechar un hábito requiere de mucha disciplina y esfuerzo, lo que me lleva a necesitar una potente razón para querer hacerlo… y digo bien… «querer hacerlo»… dejar de pensar las cosas en términos de obligación («tengo que …») para pasar a pensar en términos de elección («quiero hacerlo…»).
Esto te lleva a trabajar en algo que debe estar definido incluso antes de definir tus metas …¡Tu Propósito! Cuando hemos trabajado, definido y asumido nuestro «para qué», es precisamente desde ahí donde formulamos las acciones desde el «querer» y no desde el «deber»… ¿Tienes tu claro tu propósito?…. Hay cuatro preguntas clave que debes poder responderte para tener definida esa brújula que necesitas: (tanto como persona como empresa).
- quien soy / quien es mi empresa
- de donde vengo /de donde venimos como empresa
- a donde voy / hacia donde queremos llevar este negocio
- para qué quiero ir / para qué queremos llegar a esa meta (legado o huella en el entorno)
Te animo a que empieces a trabajar estas respuestas y desde ahi, definas ese propósito que será lo que alimente tu motivación, especialmente cuando las cosas se pongan mas complicadas (es ahi donde tu entrenamiento mental va a marcar la diferencia).
¡Te deseo un entrenamiento productivo!
Begoña Pabón Cuadrado
Mentora de Liderazgo y Facilitadora Estratégica para Empresas